domingo, 27 de septiembre de 2009

Señor Chinarro

Señor Chinarro
"Escribir relatos es más sosegado, no tiene la tiranía de una canción"
( 26/09/2009 )



A la venta la segunda edición de Noséqué-nosécuántos, que firma el líder del grupo Antonio Luque, tras agotar en un día la primera


Marta Caballero
Si alguno de sus fans tenía duda de cómo es el mundo según Antonio Luque, líder del grupo Señor Chinarro, el pequeño volumen Socorrismo (Alpha Decay) tiene algunas respuestas. Dos relatos dan las claves de cómo es este escritor de letras más allá de "la tiranía de la música". Largos párrafos para dos historias cortas que descubren facciones desconocidas en el autor de Noséqué-nosécuántos y cuya primera edición se agotó en un solo día. Mientras intenta encontrar la púa o averigua quién será su próximo batería, se afana en juntar letras: "Quiero hacer un libro gordito, que pese", adelanta.

PREGUNTA.- En un día se han vendido todos los ejemplares de la primera edición de Socorrismo. A ver si ahora va a haber más negocio en las letras que en el pop…

RESPUESTA.- Me he enterado esta mañana y la verdad es que me he alegrado mucho, aunque luego he leído un par de mails personales que como siempre han sepultado la alegría en un momento… en fin, que no me he sorprendido demasiado porque suponía que los que compran los discos iban a ir a comprar el libro, aunque tampoco pensé que fuera a agotarse tan rápido. Y, sí, me gustaría que se vendieran más libros que discos, porque por lo menos no se piratean.

P.- ¿Por qué se puso a escribir?
R.- Porque tardo en encontrar la púa, porque tardo en encontrar una banda duradera, porque me cuesta trabajo sacar la guitarra de debajo de la cama y porque al final uno tiene el ordenador a mano con el procesador de texto abierto. También me animé porque Alpha Decay me invitó a participar en la antología Matar en Barcelona con un relato. En aquella ocasión la trama venía dada por los hechos -una serie de asesinatos en Cataluña-, aunque luego me los pasé por… bueno, que no la seguí mucho. Al final me divertí escribiéndolo. Tanto, que anoche estuve leyéndolo y me partí de risa porque no me acordaba de cómo acababa y no me podía creer que yo hubiese escrito estas cosas y encima las haya hecho públicas. Escribir también me resulta divertido de momento porque es nuevo.

P.- Al margen de las historias de Socorrismo, ¿Qué ha querido contar con este libro?
R.- Mis ideas sobre las cosas son las que son y aparecerán en las canciones y en los cuentos mientras los haga. No tengo vidas infinitas ni una opinión sobre todos los asuntos del mundo. Tengo mis creencias y mis prejuicios, los mismos con los que todos nos tenemos que apañar, así que supongo que esos son los que están en el libro.

P.- De acuerdo, pero su libro tiene momentos más parecidos a una suerte de neorrealismo andaluz que a la sentimentalidad cotidiana que caracteriza sus canciones. Hay bastantes diferencias, vamos. ¿Cree que algún fan indi se sentirá decepcionado?

R.- Espero que no, yo he escrito un libro, no les he hecho una putada. A veces ellos mismos no se ponen de acuerdo con las canciones de un disco, a unos les gustan unas y a otros esas les parecen malísimas. Espero que si no les gusta ninguno de estos dos relatos pues les gusten los siguientes cuando los escriba. Yo ahí no puedo decir nada.

P.- ¿Se ha sentido cómodo, quizá más cómodo, a la hora de expresarse con la escritura que con la música? ¿Ha llegado a territorios desconocidos de su creatividad?

R.- La canción es un ejercicio de síntesis y el relato es más alargable. No tiene por qué ser tarareable ni agradable ni popular. Es más sosegado porque no tiene la estructura ni la tiranía de la música y de la canción.

P.- ¿Ha recibido ya alguna crítica?
R.- Pocas, pocas. Pero en general parece que bien, ¿no? La verdad es que me daba un poco de miedo el asunto. Pensaba: a ver si ahora por meterme de camisa de once varas me van a poner a caer de un burro y no les va a gustar ni esto ni las canciones.

P.- ¿Cuáles han sido los referentes?
R.- No lo hago concientemente, me pasa igual que con la música: a lo mejor escucho un disco y la siguiente que compongo me sale parecida, pues lo mismo. La verdad es que me quedé muy pillado por Proust y de sus las subordinadas eternas, los parráfos largos. También he leído mucho a Kerouac, a Kafka.... pero decir esto me parece que es un poco pretencioso. También me han dicho que recuerdo a Mortadelo y Filemón, de Ibáñez, y a mí eso me encanta.

P.- Desde luego lo de Proust, por lo menos en las frases largas, se le ha notado.
R.- Pues me alegro, todo lo que me parezca a los buenos, bien.

P.- ¿Se animará con una novela?
R.- Me gustaría escribir un libro gordito, que pesara, y creo que puedo hacerlo. Ya he empezado a escribirlo, es un rollo sobre la industria aeronáutica de Sevilla. Tengo claro los personajes, qué les va a pasar. Ahora se trata de que me concentre y darle dos o tres empujones. Hay una parte que transcurrirá en Marruecos, así que allí me fui porque quería tomar notas -y también pasármelo bien-, pero lo primero que hice fue escribir una letra de una canción. Si es que no se puede

P.- Así que prepara disco.
R.- Tengo 10 canciones ya con su letra, pero tengo que buscar músicos malagueños. Los músicos de Maga, que me acompañaban antes, han vuelto a tocar con su banda, y además yo me hago un poco viejo como para ir a ensayar a Sevilla con 400 kilómetros de por medio, me da pereza. Así que ya tengo a dos malagueños conmigo. Y ando con problemas con los bateristas. ¿Puedes titular "se busca batería?

sábado, 12 de septiembre de 2009

Lito Nebbia




Libro de cuentos infantiles de FERNANDO DE VEDIA.



ENTREVISTA: MÚSICA - Entrevista
Litto Nebbia nunca mira atrás
JUAN PUCHADES 12/09/2009



El legendario fundador del rock argentino es tan torrencial y polifacético como imposible de ajustar a un estilo: él es, en sí mismo, un género. El autor de La balsa presenta en España Soñando barcos, un álbum viajero en el que todo encaja y suena perfecto

Disculpa, Litto baja enseguida, pero es que le vino una canción. Una melodía bellísima". Quien habla es Álex de Luca, la mujer de Litto Nebbia, en el portal de unos apartamentos del barrio madrileño de Salamanca. Los prolegómenos de esta entrevista se ajustan así a uno de los tópicos que rodean a este músico: lo prolífico de su arte, su permanente estado de vigilia compositiva. Tiene escritas bastantes más de mil canciones y supera ampliamente los cien álbumes. "Las canciones vienen solas. Se me ocurren cosas todo el tiempo", explica sonriente cuando baja. No ha traído grabadora en este viaje y la canción que ha "llegado" esta mañana la ha estado transcribiendo a papel pautado, de ahí la demora.




"Nunca me gustó que me pusieran una etiqueta, porque cuando te la ponen es como si después no pudieras hacer otra cosa"
Litto Nebbia (Rosario, Argentina, 1948) no hace gala de su estatus de leyenda de la música popular en nuestro idioma, y podría, pues su currículo apabulla: a los 16 años grabó con el grupo Los Gatos Salvajes, sentó las bases del "rock nacional" argentino -o rock de autor en castellano- en 1967 con Los Gatos, para los que escribió, junto a Tanguito, y en los lavabos de La Perla del Once -uno de los locales que sustentan la mitología rock de aquel país-, ese himno fundacional llamado La balsa, del que se vendieron en tiempo real 200.000 copias.

Tras cinco discos con el grupo, inició una carrera solista que ha estado marcada por una búsqueda constante: definió la canción urbana, se aproximó al folclore, probó la improvisación jazzística aplicada al rock, firmó inmensas canciones que forman parte de la memoria popular argentina, se empapó de funk, escribió bandas sonoras, música para orquesta sinfónica y canciones infantiles, se alió con músicos brasileños y uruguayos, grabó una soberbia trilogía en la que releyó a su aire el cancionero Beatle, y últimamente se ha adentrado en el blues junto al trío La Luz -banda versátil creada a su medida-. Además, este músico culto y completo produce y arregla discos de otros -por ejemplo, El palacio de las flores, de Andrés Calamaro- y, persiguiendo la libertad artística completa, desde hace más de veinte años mantiene su propio estudio de grabación y discográfica, Melopea Discos. Sello fundamental en los años noventa para el resurgir del tango, desde donde recuperó a tres de las glorias del género olvidadas en aquellos tiempos -Enrique Cadícamo, Virgilio Expósito y Roberto Polaco Goyeneche- y descubrió a nuevos y tan sólidos valores como Adriana Varela o, ahora mismo, a los jóvenes afincados en Madrid Mariel Martínez y Alejandro Picciano, a los que ha producido su notable estreno.

Litto Nebbia es, en fin, tan torrencial y polifacético como imposible de ajustar a un estilo: él es, en sí mismo, un género. "Para mí, la música es sólo una", comenta, "lo único que divide la música es la gente: hay gente que toca como el culo y gente que toca bien; hay gente que tiene buen gusto, y gente que no. Cuando me meto en algo trato de mostrarme de manera natural. Me metí mucho a producir tango, pero no quiero convencer a nadie de que vengo del tango ni de que soy un tanguero. Si uno ama una música que no le pertenece de raíz, tiene que ilustrarse en la temática de esa música para poder tocar algo con el estilo personal de uno, humildemente y sin ofender a esa música, tratando de hacer algo creativo.

Porque qué sentido tiene, para la humanidad o para mí mismo, que haga un tango idéntico a como era, ¡no sirve para nada!". En todo caso, y pese a sus giros estilísticos, que en ocasiones pueden haber despistado a muchos, su impronta personal siempre ha permanecido indeleble, y él sigue considerándose parte del rock: "Sí, sin duda. Lo que nunca me gustó es que me pusieran una etiqueta, porque cuando te la ponen es como si después no pudieras hacer otra cosa".

En Madrid, en el verano de 2008, ultimó la grabación de su más reciente disco, Soñando barcos. Un trabajo que nace de ese entusiasmo, casi inconsciente que, cumplidos 60 años, es su fuerza: recibió un correo electrónico del letrista salmantino Juan Mari Montes, al que no conocía de nada, presentándose como admirador suyo. Montes lleva dos décadas firmando textos de canciones para gente tan dispar como Cómplices, Loquillo, José Mercé, Los Chichos, Hilario Camacho o el Dúo Dinámico.

"Me envió cinco letras", recuerda Nebbia, "y al rato me puse con el piano y musicalicé dos de ellas de un tirón. Si mal no recuerdo, Si te vas y Botellas vacías. Hice una maqueta en mi casa y se la envié en mp3. Como le gustaron mucho, me envió más textos, y pasó lo mismo, seguí musicalizándolos. Finalmente, en un par de meses llegué a tener catorce canciones. Sus letras son muy sensibles y estéticas. Es la primera vez que me ocurre algo así... escribir tantas canciones con alguien a quien no conozco personalmente".

Una de esas canciones, Si te vas, acabó siendo interpretada por Ana Belén en su último álbum.

Montes le pasó las maquetas de esos temas al músico y productor Paco Ortega y éste, entusiasmado, se ofreció a producir un disco con ese material. Así comenzó a crecer Soñando barcos, con el correo electrónico como medio de comunicación. Un trabajo grabado por Nebbia y La Luz en su estudio de Buenos Aires, y retomado en Madrid por Ortega. Donde se introdujeron algunas ajustadas pinceladas flamencas -con la guitarra de José Losada- y se grabaron -tocando en directo- tres temas enteros en Musigrama, el estudio de Ortega donde se finalizó este álbum viajero en el que todo encaja y suena perfecto, hermoso: con bandoneón o con guitarra flamenca, es puro Nebbia, el Nebbia que domina ritmo y melodía, el de la voz cálida y próxima, el creador que vive en constante evolución. Para él, éste es su primer disco "hispano-argentino, por producción y canciones".

Soñando barcos acaba de llegar a las tiendas, pero antes, en Argentina, ha visto la luz Bella Madrid, una producción que tomó cuerpo durante los tiempos muertos de la grabación de Soñando barcos. Son improvisaciones aprovechando el piano de cola del estudio. Al escucharlas, consideró que ahí había "un disco sólo a piano". Este redactor fue testigo de cómo, tras calentar unos pocos minutos, y ante el pasmo de los presentes, grababa nuevas e increíbles improvisaciones para finalizar su otro disco español. Y es que Nebbia no piensa en música, la respira y no pierde el tiempo: en Argentina acaba de editar otra obra, La virtud del día, en la que musicaliza poemas de Hugo Diz, con la que cubre un año poniendo música a versos ajenos. Como se puede apreciar, ordenar su discografía es una pesadilla para el aficionado.

Para presentar Soñando barcos, tras girar por Francia, ofrecerá varios conciertos en pequeñas salas españolas durante septiembre y octubre, tocando él solo guitarra y piano y, en contra de lo que dice la leyenda -"¡eso sólo fue una época!"-, sí tocará algunos de esos clásicos que pertenecen a varias generaciones de oyentes: Sólo se trata de vivir, El otro cambio, los que se fueron, Yo no permito o Nueva zamba para mi tierra.

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Soñando barcos. El Pescador de Estrellas / EMI. Litto Nebbia actuará el próximo día 22 de septiembre en San Sebastián (Bar & Jazz Alt Xerri), y en octubre, los días 9 y 10, en Madrid (La Cueva del Bolero); el 29 y el 30, en Vigo (El Contrabajo), y el día 31, en A Coruña (Jazz Vides).


viernes, 11 de septiembre de 2009

Chus Visor
"He perdido amigos por no haberlos editado"( 10/09/2009 )

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Recibe el I Premio La Trastienda de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo

Nuria Azancot
Chus Visor, creador en 1968 de la editorial de poesía Visor, recibe esta tarde en la UIMP el I premio La Trastienda en reconocimiento a sus más de cuarenta años “de vocación creadora y editorial”.

Pregunta.- ¿Siente que ya era hora, o es demasiado pronto?
Respuesta.- Ni una cosa ni la otra, la verdad es que no me han dado ningún premio jamás, pero también sé que hay mucha gente que lo merece tanto o más que yo.

P.- ¿Cuál es el secreto para vivir 40 años de editar poesía?
R.- El único secreto es el trabajo, y el no fiarse ni de segundas ni de terceras personas a la hora de elegir lo que publico. Sólo intentamos hacerlo lo mejor que sabemos y podemos, sin falsas modestias pero también sin miedos ni complejos.

P.- ¿Por qué acusan a la editorial Visor de vivir sólo de premios y subvenciones?
R.- Porque no se enteran. Qué quiere, a cada premio pueden presentarse 600 ó 1200 poetas... y los 599 o los 1999 que no ganan acaban odiándonos y acusándonos de todo. Yo no me considero el mejor de nada, pero es difícil convencer a un poeta de que no es.

P.- ¿Qué ha sido lo mejor y lo peor, como editor y como amigo, de estos 40 años?
R.- Lo mejor son los amigos de verdad, poetas, que he hecho estos años. Lo peor, lo contrario, los poetas que han dejado de ser amigos porque no les he publicado algo. Sí, eso es lo que más me jode, los amigos que he perdido porque no los he editado.

P.- ¿Se le ocurre un poema o un poeta contra la crisis?
R.- Je, je, esa sí que es buena.. No sé si la poesía puede consolar o no a quien ha perdido su trabajo o no sabe cómo llegar a fin de mes, pero ahora estaba leyendo “Castilla”, de Manuel Machado, un poema que me aprendí siendo niño, y sí, podría ser una buena lectura en estos tiempos.

P.- Cambiando de tercio, Chus Visor es un reconocido seguidor del Atlético de Madrid. ¿Se unirá este fin de semana a la protesta de los socios contra Gil Marín?
R.- No sé qué voy a hacer. Soy del Aleti desde niño, tengo la medalla de plata del club, voy todos los domingos, pero me tienen hasta los cojones el hijo, el nieto y el sobrino de Gil. Los socios no podemos hacer nada porque las acciones son suyas. La única protesta posible sería no acudir al campo, porque no se puede hacer nada, pero haría cualquier cosa para que los Gil desaparecieran del club.

P.- Y eso que tienen al Kun y a Forlán. En fin, muchas gracias y enhorabuena por el premio...
R.- Gracias, pero ¿no me pregunta por mi tercer vicio?


P.- ¿Cómo dice?
R.- Si, me ha preguntado por los otros dos, por la poesía y el Aleti, pero falta la cerveza...

P.- ¿Rubia o negra?
R.- Tostada siempre
.

Leónidas Lamborghini

Entrevista a Leónidas Lamborghini


Leónidas en la terraza lindera al estudio En 1992 recibió el Premio Leopoldo Marechal, y en 1992 el Premio Boris Vian, por su libro “Odiseo Confinado”.
Cualquier europeo sabe que Lamborghini es una marca de automóviles. Los argentinos también lo sabemos. Sabemos que Lamborghini es una marca: una marca en nuestra literatura.

Lamborghini siempre vivió en el límite. Actualmente en el límite entre Barrio Norte y Almagro, en la Capital Federal. Es un día más. Algo fresco, por ser un día de noviembre de 2008. Aunque todos los integrantes de la revista saben que no es un día más. Incluso él, y tal vez también su hija Teresa, que lo acompaña con ternura y admiración. No es un día más. De su departamento modesto, donde vive rodeado del afecto de sus hijas, amigos, admiradores y vecinos, Leónidas se traslada hasta el búnker sonoro de Lamás Médula en Saavedra. Para decir, para opinar, recordar, polemizar. Para leer sus poemas. Para estar más cerca de los que, desde hace décadas, vienen siguiendo su obra.


Lamborghini llega con su hija Teresa al búnker sonoro de Lamás Médula en Saavedra

Entonces Lamborghini dice…


¿Explicar…?
“Entonces, el que explica pierde (risas) yo voy a tomar ese riesgo, seguramente que no voy a salir a flote, pero bueno, asomar un poco la cabecita antes de ahogarme del todo”.

El poema
El poema es la cárcel de la voz, le ofrece metáforas, elementos de adorno, pero si el tipo no es capaz de abrirse paso entre esos barrotes, suena, hace poesía. Hay que buscarle la vuelta para no aumentar la inflación del lirismo. A mi me gusta leer a los líricos, pero cuando empiezan a macanear, ¿viste?...Hay que poner al lector como parte de la cosa, salir de la cosa fácil y, sobre todo, tener coraje con la palabra”.

Leónidas, escaleras arriba, como en sus Coplas al Che, de 1968

La anécdota
“Yo andaba sin guita, no quería ningún trabajo de oficina, qué se yo. Entonces me dicen los muchachos de Poesía Buenos Aires, Francisco Urondo y Rodolfo Alonso, mirá, para darte una mano vamos a hacer una lectura paga. ¿Cómo?, les digo. Sí, vos vení al Teatro del Pueblo, (en el que todavía estaba Barletta) y leés el poema, lo que tengas. Era éste, (se refiere al Solicitante Descolocado). Y nosotros recaudamos y toda la guita va para vos. Que después, mi tocayo, Leónidas Barletta se enojó mucho, (Risas) porque él pensaba que la recaudación iba para el teatro.
Y leí el poema. Y cuando la gente se iba, decían: “¿para esto pagué?”, “esto es una porquería”, Emma de Cartossio. (Risas) Airados ¿no? “Para escuchar esta porquería” Pero claro, yo…era lo único que podía hacer…”


Los discos
“La canción de Buenos Aires!...Ahí también fuimos con Urondo a verlo a Héctor Alterio, en el Nuevo Teatro. Y dice, bueno sí, yo lo voy a hacer. La grabación estuvo a cargo de Del Priore, “Tango Blues” se llamaba. No supimos qué pasó con la grabación. “Eva Perón en la hoguera” también se grabó con música de Dino Saluzzi, cuando el tipo no era del todo conocido”.

Todo a su tiempo
“Y lo tenés a Stendhal, porque Stendhal también, no le daban pelota y dice: dentro de cien años seré leído. Escribía en medio de los románticos. Y él lo que hacía era enfriar la escritura para hacer una vivisección de los sentimientos, entonces eso no iba en el tiempo de Byron, de todos esos tipos”.

El compromiso
Y sí, había una poética del Partido Comunista, que era la lagrimita, costó mucho decir que esa lagrimita era fácil y hasta falsa. El compromiso no es el culpable de que el poema no ande, sino el poeta, que no le alcanza, que ve eso ahí pero no le alcanza. Y ahí sí que necesita lectura o que el azar acuda en su ayuda. El compromiso en todo caso es con la libertad, con el lenguaje, hay que dejarlo ser al lenguaje”.



Entrando al estudio de grabación. Detrás, Teresa Lamborghini y (tapado por El Solicitante Descolocado) uno de los directores de la Lamás Médula, Néstor Colón


Lo lúdico
“Y ahí tenés, en el Fausto mismo está lo lúdico, la idea de juego. Dios después de crear el mundo está aburrido. Y lo llama al diablo: “Vení, a ver qué hacemos…” Y aparece este hombre en la tierra, el doctor Fausto, y ahí tenés, ahí mismo se arma la apuesta. Decime si no se cagaba de risa mientras escribía, el viejo éste. Y… la juventud está en las neuronas, que se yo. Era un viejo como de noventa años y se enamoró de una piba de dieciséis años, le hizo un poema, Erika se llamaba. Se quiso casar y todo, pero la familia de la piba lo sacó cagando… No hay caso, no hay celebridad que valga”.

La tradición
“Bueno, yo parto de una tradición, incluso con la gauchesca, para ver qué se puede hacer con eso. Pero el modelo estaba demasiado estereotipado: la guitarra, las boleadoras y toda la cosa folklórica … Y en esto juega el tema de la lectura, todo es cuestión de cómo se lee. Y para el caso del Martín Fierro, el que instituyó la manera de leerlo fue Lugones, por eso no se detienen en qué significa esa risa. Porque la risa está ahí, toda la gauchesca está cruzada por esa risa zorra que halaga al poder por un lado y por el otro lado se la da. Entonces la reescritura que hago de la tradición, es también una invitación a leerlos de otra manera, leerlos con astucia, con sus mismos códigos. Y siguiendo con el hilo conductor, después tenés a los hermanos Discépolo, todo eso que se llamó “teatro chico” Defilippis Novoa”.

Leer
“Como leés, escribís. La lectura tiene que ser productiva. Está el tipo que lee y lee, pero es miope. Porque está eso de la lectura miope: la lectura de los que no ven más allá de lo que están leyendo. Hay que variar el ángulo de lectura, porque leer: se lee mal. Como decía Nabokov: “¡Oh, quién me diera un lector creativo”.

El Modelo
“La misma palabra te lo dice: Modelo. Es fuerte eso. Hay una pretensión ahí. La pretensión de presentarse como perfecto, intocable. Tiene esa cosa paralizante. Entonces hay que ir contra el modelo, pero ¡ojo! no podemos dejar de pensar que es útil, pero si se lo critica, y criticar no es romper o ignorar. Se trata de investigar, a ver qué más puede decir ese modelo. Orbitarlo para después salir y hacer otra propia órbita. Trabajar en tangencia con el modelo. Pero nunca dejar que te paralice. Y sino fijate en el friso de literatura que va desde Homero, pasando por Virgilio, hasta Dante. Está compuesto de modelos y derivados, derivados que a su vez se convierten en modelos. En la Odisea tenés que el que viaja es el vencedor, Ulises, que quiere volver a su casa, y llora. En la Eneida lo tenés a Enéas que viene a ser como un Ulises, pero el tipo es un vencido, no tiene casa… Entonces tiene el mandato de los dioses para ir a fundar una ciudad que va a dominar al mundo. Ahí funciona esto de las semejanzas y las diferencias. Y por último, Dante escribe su propia Odisea, la Odisea del ultramundo, cuya finalidad es ver a la divinidad”.


Leyendo El Gayo Fané


La Parodia
“La parodia no ha sido bien entendida. Sí, por un lado es cómica, pero como dice Nietzsche: “empieza la parodia, empieza la tragedia”. Y también dice de la parodia que es el arte del futuro, por cuanto es el arte que descubre esas imperfecciones y se ríe de ellas y se ríe del modelo como modelo. Vos ves que nosotros somos muy chistosos, hacemos la parodia y que se yo, pero viene con sangre eso, viene con guerra civilDice Nietzsche: “llegado el término la parodia va a reírse de lo más sagrado”. Y eso es lo que estamos viviendo ahora con este modelo, porque qué se sostiene más allá de un tiempito… Los valores están todos huecos, y es la parodia la que hace ver ese vacío, es una grieta en el muro de lo serio entre comillas, para descubrir la impostura que hay del otro lado. Y yo digo que las nuevas generaciones de poetas que conozco están haciendo la parodia; incluso parodia de la poesía, pero eso es una inmolación, porque acá el poeta sigue siendo El Poeta”.

La vida, la obra
“¿Para qué escribís? Para sacarte todo eso y que quede una especie de biografía en verso. Solamente hay que tener en cuenta lo que decía el maestro mejicano Alfonso Reyes. Esto es muy importante, el tipo decía, está bien, en el poema o en la obra está el poeta, todos sus avatares, hasta la cosa cotidiana, bueno, cualquier joda que tenga con la mujer, todo eso está, pero a condición de que esté como elaborado, como trabajado para una transformación. Y el que no lo entiende así, comienza con su yo enfático, no entiende que no tiene que ser lineal.

Por ejemplo, para interpretar la vida de Hernández, si no sabés leer su poesía no vas a ver todo eso que vivió: que le pusieron precio a su cabeza, porque él no lo dice, se vale de otro recurso, usa un personaje. Y acá la maestría está en que el lector no te vea detrás del personaje dándole letra. Ese personaje tiene que vivir en el papel, con sus contradicciones, con todo.

Yo le decía al colorado Ramos, Abelardo Ramos: “es un milagro, el Martín Fierro es un milagro… la sextina esa…” La Capilla Sextina, le digo yo.
Y ahí lo tenés a Hernández encerrado en el hotel, con miedo de que le bajaran la caña, porque eran tiempos así, estaba Sarmiento. Pensá que Hernández había sido militante en la montonera de López Jordán. Se había tirado contra Mitre, contra el sistema ¿no? Y él sabía que se la podían dar… Y se encerró en el hotel y dice, y qué hago, y le salió ese poema… El tipo escribía en unas libretas de almacenero. Yo tuve esas libretas en mi mano, las libretas de la segunda parte. Vos sabés las tachaduras que tenían, no salen de pedo esos versos, hay mucho laburo ahí. Y después el tipo era un artesano, porque cambia las palabras muy bien, si vos leés las libretas te das cuenta que cuando el tipo cambia una palabra por otra, te das cuenta de la oreja que tenía”.


Con una primera edición (1965) de Las patas en la fuente


La realidad
“El gran tema de la épica con un antihéroe está ahí… La épica esta ahí delante de las narices, en los cartoneros, hay que encontrar la forma no “sentimental y coqueta” de contar esa realidad. Los gauchescos lo consiguieron, ahora el desafío está planteado, pero eso es para las generaciones nuevas…yo ya no me animo”.

Hoy
“Estoy no escribiendo nada, hay baches, todos los tenemos, baches en los que no tenés ganas… Ahora, si viene la musa la tenés que atender”.

Finalle
“Porque cuando vos empezás a escribir y has tenido lecturas y has analizado un poco desde la poesía, no desde la teoría, eh! desde el artesanado digamos ¿no?...El artista debe ser un artesano también, tiene que encontrar la palabra. Saber dónde la coloca, saber dónde hace el mayor efecto o el efecto que vos querés. Y eso cuesta, pero está en el gusto también, si un tipo no tiene gusto no se lo vas a hacer, si un tipo no nació para poeta, tampoco. Yo no nací para poeta, yo nací para la desobediencia”.


Lamborghini, a los 81 años, en una pausa de la lectura
de su poema Villas..."sopa, sopita, doctor en médicina.../
la carne no la ven / la leche no la ven…/los chicos mueren
como moscas"



Entonces Lamborghini lee…


EL SOLICITANTE DESCOLOCADO


Me detengo un momento
por averiguación de antecedentes
trato de solucionar importantísimos
problemas de estado;
vena mía poética susúrrame contracto
planteo, combinación
y remate.

En vez
tú no tienes voz propia
ni virtud
dijo
y escribes sólo para
yo quise decirle mentira mentira
para purificarme.


La pista se rodea
de todas las especies, de todos los órdenes
y clases
sobre todo de público
en la primera fila van
los relegados.

Siempre algún gobernante
algún guerrero ilustre, algún
funcionario aventajado
da el puntapié inicial
entonces entro yo
entrando por el aro.

Tome asiento
nadie debe perderse
un espectáculo
abro mi risa negra
a función continuada.

Y a la bartola
haciendo de las mías
en el país del tuerto
es rey.


LA CURA DEL MATE


-¡Ave María Purísima!

-¡Sin pecao consébida!
-¿Está en pecao? ¿Y es un pecao irremedible? (Ningún mayor dolor)
¿Pero no deja de buscar la asolusión? …¡Velay con el pecador!
¿Y no conoce usté la cura` el mate? …Don Antonio
me la enseñó: él risaba en su mate vacío y el mate
en un santiamén se le volvía Templo …¡Lo viera! ¡Creameló!:
cuando en la soledá de la pampa el miedo a su pecao
lo agarraba a coscorrones ¡mea culpa! ¡mea culpa!
y quería míar tuita su culpa y
no tenía Templo ande hacerlo
metía su humilde bombiya de anacoreta gaucho en el vacío
`el mate y por el pico` e lata comensaba a echarle resos…
¡Lo viera!:
Su trompa no se despegaba e` la bombiya y ni una palabra
salía` e su boca porque él risaba con la mente
y los resos iban pasando al fondo` el mate
por el tubito` e la bombiya ¡ahijuna! y el mate se le iba
enyenando` e resos y áhi está: en un santiamén
el mate se le había vuelto Templo. Dánosle. Dánosle.

-¡Mate Padre!

-Y Don Antonio y su mate se empiezan a dir pa` arriba…
¡Creameló! áhi arriba suspendidos en la inmensidá` el Universo
y abajo la inmensidá de la pampa y tanto espacio empiesa
a curarlo` el pecao y siente cómo la asolusión le viene
del fondo` el mate… ¡Y no! ¡Qué avería de` estrañar la yerba!
sí la gracia (¡Danoslé!) (¡Danoslé!)
está áhi en risar y déle reso con el mate vacío en el
vacío pa` que` el vacío del mate en el vacío
¡Jué pucha!
lo deje vacío` el pecao …¡Vacío Santo!

-¡Mate Nuestro!

-¡Vacío Nuestro!
¡Ave! ¡María! ¡Purísima!
¡Sin! ¡Pecao! ¡Consébida!
Avemaríapurísimasinpecaoconsébida

-¡Hijunigransiete!



EL GAYO FANÉ


El gayo Fané
en la madrugada:
visto en la madrugada
por la fiera del tiempo que
lo chifla.

La fiera del tiempo
chifla el gayo Fané
y le hace ver:
la Belleza cascajo. Teñida.
la Belleza chueca. la Belleza
dos cuartas. picoteada.

cachivache.
La Belleza percha. des-
cangallada. la Belleza
nuez: bajo. deshecha.
El gayo Fané
en la madrugada
chiflado por la
fiera del tiempo
se ve:
un mendigo
un desplumado
un ruin
un de rodillas.


El chiflido
de la fiera del tiempo
en la madrugada. el chiflido
que hace ver. que chifla.
El suicidio
del gayo Fané:
chiflado.




VILLAS
está dedicado a Frantz Fanon


los chicos mueren como moscas
los chicos mueren como moscas

-Distrofia: primer grado segundo grado tercer grado
la leche no la ven la carne no la ven
sopa
sopita
Distrofia: malamente
desnutridos: primer grado segundo grado tercer grado
Nacido en 1925 en Fort-de France doctor en medicina se especializó
más tarde en psiquiatría
-Es cosa de agarrarse la cabeza pero
estas cosas hay que decirlas estoy
dispuesto a decirlas no
a gritarlas
Las proteínas que están metidas en la carne no están metidas en
la sopa sopita las proteínas necesarias no las ven
es cosa
. Nacido en 1925 para no gritar sino decir
hay que decirlas
alimentados malamente
-El 65 por 1000 mueren como moscas sin proteínas:
la carne no la ven
la leche no la ven:
las proteínas de la leche son distintas pero tan necesarias
en Fort-de France 1925 en psiquiatría :

-Estos chicos tienen problemas de dislexia: afasia para la
lectura se sienten segregados rechazados: afasia
dis
lexia
dis
trofia
malamente:
no ven las proteínas que están metidas en la carne no la ven
las proteínas que están metidas en la leche no la ven
primer grado
segundo grado
tercer grado
tan necesarias
Los chicos mueren como moscas
los chicos mueren como moscas
mire señor aquí los chicos la laguna de aguas podridas
sopa
sopita
doctor en medicina
agarrarse la cabeza pero sin gritar estas cosas hay que decirlas
hace tiempo
especializado en no gritar hace mucho que dejé
el grito salió de mi vida el grito salió: nacido en 1925, en
Fort-de France más tarde en
decir distrofia
decir
estos chicos se sienten segregados se sienten afacia rechazados
afacia para la lectura tienen problemas
el grito salió dicho hace bastante tiempo que salió de mi vida
la laguna de aguas podridas con borde de basuras
-Un buzo tuvo que bajar a rescatar el cadáver del niño
los niños mueren como moscas
en la sopa no ven las proteínas en la laguna el 65 por 1000
allí juegan: las proteínas escondidas
la carne que no ven
las proteínas escondidas de la leche son distintas
tan necesarias
escondidas
dis
dis
trofia
dis
dis
lexia

dificultades afacia aquí
los niños juegan en el borde de basura de las aguas podridas
de la laguna sopa las proteínas escondidas escondidas
y mueren como moscas 65 mueren por mil
un buzo tuvo que bajar al fondo para rescatar allí escondidas
-Mire señor aquí
Doctor: en medicina. En el primer año no debe faltarles nada

primer grado segundo grado tercer grado
-En el primer año es como construir un edificio hay que ponerle los cimientos
sopa
sopita
los cimientos con sopa los cimientos en
los cimientos la leche no la ven los cimientos la carne no la ven
los cimientos: es como construir un edificio
malamente
se derrumba
los niños mueren como moscas en la laguna sopa aguas podridas 65
por mil se derrumban edificios construidos con proteínas
no las ven con dis-trofia dis-lexia malamente malamente
malamente malamente malamente malamente malamente mala mente
mala mente:
en el borde la basura las proteínas escondidas jugando a
-El buzo tuvo que descender hasta la afacia
dificultades para
dis
dis
para rescatar las proteínas escondidas en la laguna de aguas
el buzo se especializó en: doctor Fort-de France 1925
los niños segregados los cadáveres como moscas
más tarde en psiquiatría
los cadáveres de los chicos malamente
mala mente
mala mente
65 por 1000 no rescatados jugando a ver las proteínas

de la carne no la ven de la leche distintas no la ven
en la laguna de aguas
sopa sopita
en la laguna de aguas el buzo Fort-de France
los cimientos del buzo Fort-de France 1925 rescatando moscas sin
proteínas
estas cosas hay que decirlas
el grito salió de mi vida de la laguna sopa podridas el grito
salió hace bastante de mí
Nacido en 1925.
-La distrofia puede ser de primer grado de segundo grado de tercer grado de cuarto grado de quinto grado de sexto grado de séptimo grado de octavo grado de noveno grado de décimo grado
malamente
dislexia
-La dislexia es una afacia (dificultades para la lectura)

estos niños se sienten segregados rechazados tienen problemas
de estas cosas hay que decirlas problemas de estas cosas:
problemas para la la
-El 65 por 1000
problemas sopa sopita el el
más tarde en psiquiatría
dificultades hace tiempo podridas hace bastante 1000 es cosa
de agarrarse con borde de basuras estos chicos tienen problemas
para la la
leche no la ven
carne no la ven
malamente

-Es un desorden de la nutrición sistematizado o localizado
en la laguna de aguas las proteínas son distintas con bordes
desnutridos es cosa de agarrarse
los chicos mueren como moscas
los chicos mueren como moscas
en el primer año es como construir un Fort-de France en el primer
año los cimientos para la lectura jugando a ver
-Mire señor esta mujer dio a luz aquí sola dificultades problemas
con el cordón umbilical para cortarlo no había nadie en desorden
el grito salió
sopa
sopita
dio a luz aquí
distrofia
el grito salió no había nadie para cortar el cordón malamente
no había.
Dificultades para la
las proteínas de la carne de la leche escondidas
para el
cordón umbilical escondido esta mujer mire señor problemas para
agarrarse la cabeza estas cosas el grito salió para no gritar
sino decir
no había nadie
esta mujer aquí dio a luz con borde de basuras

malamente mala mente
más tarde especializado en psiquiatría
sistematizado
el cordón umbilical el buzo con el cordón tuvo que descender
hasta el fondo de la laguna de aguas localizado jugando a ver los
cimientos
buzo Fort-de France
doctor Fort-de France
descender hasta el fondo de la la:
primer grado
segundo grado
tercer grado
cuarto grado
quinto grado
sexto grado
séptimo grado
octavo grado
noveno grado
décimo grado
mueren como moscas: 65 por 1000

dio a luz 1925 en Fort-de France las proteínas escondidas en el cordón
umbilical nadie umbilical para cortar
umbilical
los niños juegan con el cordón dificultades problemas de estas cosas:
-Hay una zona de no-ser ellos se sienten segregados una región
extraordinariamente estéril y árida: Fort-de France.
la carne no es
la leche no es
las proteínas no-ser
la sopa sopita extraordinariamente estéril y árida
-Mire señor aquí
la zona esta mujer para no gritar sino decir dio a luz afacia dio a luz dislexia dificultades dio a luz
dislexia dio a luz cordón dio a luz primer grado segundo grado
tercer grado cuarto grado quinto grado sexto grado séptimo grado
octavo grado noveno grado décimo grado
dio a luz dio a luz la leche no la ven la carne no la ven
dio malamente dio a la luz no-ser dio a luz
extraordinariamente
-Hay una zona del no-ser esencialmente calva a cuyo término. Doctor
1925
65 por 1000
las moscas mueren como chicos
las moscas mueren como chicos
-Esta mujer los dos últimos meses tuvo un embarazo brutal.
estas cosas hay que decirlas
a cuyo término.


Palabras de Leónidas






Fotos Cati Armas

Uno de los directores de Lamás Médula, Ture, se despide de Leónidas mientras
el otro director, Néstor Colón, sonríe emocionado. No es una despedida más

Termina la grabación. Es el fin de la nota. Leónidas Lamborghini se despide entre risas. Reparte abrazos y agradece a técnicos, productores, integrantes de la revista y felicita al dueño de casa. Elogia su terracita –lindera al estudio–, premia al limonero con una caricia, al ficus con una mirada, y a la incipiente santa rita con una sonrisa. La tarde se empieza a mezclar con la noche. Es el fin de un día más. Termina noviembre de 2008. El ocaso llega, irremediablemente. Y se lleva a Leónidas, que dice adiós como quien no quiere irse. Parece un chico. Es un chico. Los años le han instalado un niño en la mirada. Se va haciendo bromas y dando saltitos. Agradece cálidamente por última vez y se pierde escaleras abajo. Gana la calle junto a su hija Teresa. Pronto será noche en Buenos Aires. El tiempo, que no vuelve ni tropieza, hará lo suyo. En su adiós, en sus abrazos y en sus ojos hay alegría.






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“Yo no nací para poeta”, se da el lujo de decir hacia el final de la entrevista con Lamás Médula, este Quijote de la literatura que aún hoy, con 81 abriles encima, sigue dando batalla por instalar otras modalidades de lectura y escritura en nuestro país. Nació en Buenos Aires, un 10 de enero de 1927. En su juventud se desempeñó como obrero textil y a mediados de la década del cincuenta ingresó al periodismo. Con “El saboteador arrepentido” su primer libro, de 1955, da el puntapié inicial a la paciente tarea de “sabotear” la lírica argentina. Sin embargo debió esperar hasta la década del `70 para obtener algún reconocimiento literario. Exiliado en México durante la dictadura militar, regresó al país en 1990 para encontrarse con la sorpresa de que muchos jóvenes lo tomaban como bandera. No resulta tan curioso este dato, considerado que actualmente, en algunos circuitos y a pesar de los años, se lo considera uno de los mejores poetas jóvenes. Tal vez algunos títulos de sus libros bastarían para explicar el porqué de este tándem Lamborghini-Juventud: “Las patas en la fuente” (1965), “El solicitante descolocado” (1971), “Partitas” (1972), “El riseñor” (1975), “Circus” (1986), “Odiseo Confinado” (1992), “Personaje en Penehouse” (2000), “Carroña última forma” (2001) y tantos otros…Pero claro, no se pueden perder la experiencia de leerlos.

Leónidas lee "Villas"